Mahkina
Alex Aguayo nos habla de su nueva faceta

Conversamos con Alex Aguayo, la mente detrás de los proyectos de "Alex Aguayo y Mahkina", quien nos lleva desde sus primeros pasos en la electrónica hasta su proyección internacional. Con lanzamientos en sellos como Correspondant y Re-Leaf Records; el productor originario de Salamanca comparte cómo los raves underground, la herencia musical familiar y su visión sonora entre lo analógico y digital han dado forma a su carrera.
- ¿Cómo fue tu primer acercamiento con la música electrónica?
Recuerdo que cuando estaba niño pasaba bastante tiempo en la compu y había un juego de una página muy vieja donde sampleabas partes de un track, ponías una base de batería, seguías con el bajo y los demás instrumentos, efectos, etc. Era un proceso que me llamaba mucho la atención, el cómo iba evolucionado el track mientras más elementos le ponías, acá te lo ponían muy simplificado y era cosa de apretar 3, 4 botones y listo ya tenías un resultado deun track pre grabado ya que al final era un juego.
Mi mamá era muy joven cuando yo nací, por lo que me tocó convivir mucho tiempo con sus 2 hermanos y entre los 3 escuchaban música de distintos géneros y artistas, desde Depeche Mode, Bjork, NIN, Massive Attack, hasta Sasha Sokol, Moenia, Miguel Bosé, entre muchosmás. Pero es de mi mamá de dónde viene la raíz de la electrónica, recuerdo que cuando me llevaba a la primaria o la acompañaba a hacer cosas casi siempre traía los discos de Global underground (el de Deep Dish es el que más recuerdo) y otro azul de Jimmy Van M, del sello Bedrock y otros más ya que en ese tiempo estaba el Progre 2000 en su peak, entonces de ahí creo yo viene la raíz de mi enfoque en la electrónica.
- Además de la interfaz, ¿cual es el aparato que más utilizas en el estudio y porqué?
- ¿Que elementos del trance conservas hoy y cuales haz dejado atrás?
Creo que no es que los vaya dejando atrás si no que voy rotando los elementos, hay temporadas en donde cierto sonido, efecto o técnica se empieza a escuchar “sobre-usada”, todo mundo empieza a hacer lo mismo y es ahí cuando tienes que cambiar la jugada y dejar elementos en stand by para presentar o crear nuevos sonidos y elementos o regresar a unos que ya tenías descansados e introducirlos de nuevo pero siempre intentando innovar algo de eso que ya habías dejado de usar. En mi caso al menos en el trance o progre hay ciertas bases de elementos que tienes que usar para poder llamarlo justamente trance o progre, ya sea el gate, el uso de kicks con más presencia, supersaws. Creo en esta nueva tendencia ( que según yo no es nueva si no es revivir el pasado) el sonido ya tiene que sentirse más brilloso, más digital, antes los sonidos eran más cálidos, más análogos, más Moog, Linn Drums, al menos yo lo percibo así por ahora, y es justo eso, volver a tomar cosas del pasado que se habían olvidado para volver a recordarlos y sentirlos como algo nuevo.
- ¿Alguna vez entran en conflicto tus personalidades entre Mahkina y Alex Aguayo?
Antes si jaja, había releases que salían como Mahkina que sonaban an Alex y al revés. Después de varios ya logré definir un distintivo y diferenciar uno de otro y respetar los nombres de cada uno con su sonido.
- ¿Cual es tu secreto para mezclar géneros sin forzarlos?
En la cabina pues siempre es esta idea del story telling, quedarte un rato con un género para avanzar a otro y que vaya sonando lo más orgánico posible, para que al momento de que hagas el cambio sea inesperado pero que vaya de acuerdo al mood del lugar en donde estés tocando o con la gente que está bailando.
- ¿Cómo ha influido tu origen en tu sonido?
¿Cómo ves a la escena del Bajio actualmente?
¿Qué cualidad crees que llama la atención en tu sonido?

¿Cual ha sido tu mayor aprendizaje en tu carrera?
Creo que ha sido el de disfrutar el proceso. Estamos acostumbrados a querer todo rápido, en especial en estos últimos años, a veces creía que por qué iba a sacar un track en algún sello o tocar en algún club en especial me iba a lanzar al estrellato pero no fue así, cada logro es un pequeño escalón a lo largo del camino y que se tiene que ir disfrutando lo poco o mucho que nos haya hecho crecer ese paso. El ser constante con la música, el seguir siempre abierto para aprender nuevas cosas cada día y colaborar con nuevas personas es también una parte importante en esto.
¿Cómo se logró la conexión con Correspondant?
Desde hace muchos años quería mandar algo a ese label, cuando su sonido era un poco más indie/dark disco pero por alguna razón nunca mandé nada. Años después vi que su sonido había evolucionado y era parecido al que yo estaba haciendo en ese momento, en ese entonces Jennifer Cardini estaba tocando muchos b2b con Pablo Bozzi y él tocaba algunos de mis tracks y se me ocurrió mandarle unos cuantos demos. Afortunadamente los escucho y le gustaron, me dijo que los iba a probar en algunos clubs y que me contactaba después. Unos días después regresó con la respuesta y fue así como se lanzó ese track en su VA.
¿Qué retos esperas cumplir próximamente?
En cuanto a música espero poder lograr mis próximos lanzamientos en formato vinilo. Estamos entrando en una era digital que no va a retroceder, cada día hay más información digital, libros, música, etc. Es buena herramienta ya que da la oportunidad a muchos artistas para dar a conocer su trabajo pero a la vez es ya demasiado y siento que el formato físico de la música le da ese valor extra a la música. Por cierto mi lanzamiento más reciente está ya disponible en varias distribuidoras de Europa como deejay.de, One Eye Witness, Juno Récords, Subwax Bcn entre otros. Se llama Aura Protocol y fue lanzado y logrado gracias al sello de Re-Leaf Records de la dj/productora australiana Aldonna.
¿Clubs o Raves y por qué?
¡Los dos! Cada uno tiene su encanto, su atmósfera y su vibe en general. Los clubs tienen su estructura y sonido definido. Los raves pueden ser siempre una sorpresa ya sea por su locación, line up, sonido, horario de día o noche y eso, por eso a mí me gustan ambos.
¿Cómo empezaste a producir?
Alex Aguayo representa la evolución natural de un artista que mantiene sus raíces mientras explora nuevos horizontes. Desde los raves clandestinos de Salamanca hasta los clubs internacionales, su trayectoria demuestra que la autenticidad no requiere elegir entre pasado y futuro. Con Mahkina y su proyecto homónimo, sigue construyendo puentes entre lo analógico y lo digital, entre lo local y lo global. Su próximo reto -el lanzamiento en vinilo- reafirma su convicción: la buena música es tanto memoria como innovación.