Carmen Electro: vinilo, raíces underground y el futuro de su sello

Carmen Electro, DJ y ferviente defensora del vinilo, encarna con autenticidad el espíritu del techno underground mientras traza su propio camino hacia el futuro a través de su sello discográfico. Su trayectoria es una narrativa de crecimiento personal, fidelidad artística y una profunda conexión emocional con la música. En esta entrevista, reflexiona sobre la influencia del vinilo en su desarrollo, el diálogo entre lo underground y lo mainstream, y la filosofía que impulsa su nuevo proyecto discográfico.
VINILO Y TRANSFORMACIÓN PERSONAL
La relación de Carmen con el vinilo es visceral. Su fascinación por este formato se despertó en Berlín, donde por primera vez experimentó sets realizados exclusivamente con discos.
“La primera vez que fui a Berlín de fiesta, escuché a artistas tocando solo vinilos, y esos sets simplemente me absorbieron. La selección musical y la manera en la que mezclaban los discos para construir paisajes sonoros en constante transformación me dejó totalmente hipnotizada.”
Su viaje comenzó con un solo plato en casa, reflejo de una pasión latente incluso antes de iniciar su carrera como DJ.
“Tenía un tocadiscos porque me encantaba visitar tiendas de discos mucho antes de comenzar a pinchar. Eventualmente, tuve que comprar el segundo porque ya no me motivaba mezclar en los CDJs de mi exnovio.”
Para Carmen, el vinilo se convirtió en una forma genuina de expresión personal.
“Aprender a mezclar con vinilos fue como descubrir una habilidad fascinante. Me absorbía tanto que perdía la noción del tiempo y olvidaba todas mis preocupaciones.”
Lo que para muchos representa una dificultad técnica, para ella se convirtió en un ritual desafiante y profundamente gratificante.
“Nunca me sentí cómoda mezclando digital con vinilo en un mismo set. Al poco tiempo de empezar a pinchar en clubes, entendí que lo que realmente disfrutaba era el reto, la experiencia sensorial y emocional que solo te dan los discos.”
Su decisión de comprometerse con el vinilo fue también una declaración de entrega total hacia su público.
“Quería entregar mi versión más auténtica y apasionada a la pista de baile. Así que dejé de comprar zapatos y empecé a invertir en discos. Muchos discos.”
EL VINILO COMO EXTENSIÓN DEL ALMA
Carmen encuentra en el vinilo una conexión emocional directa, sin filtros ni artificios.
“Es un formato imperfecto, y justo ahí radica su belleza. Te exige salir de tu zona de confort cada vez que te enfrentas a él.”
Admite que las dificultades —desde problemas técnicos hasta retos personales durante sets extensos— son, en realidad, oportunidades de evolución.
“Sí, puede ser estresante o incluso intimidante. Pero al final, es en esos bordes del abismo donde realmente creces.”
Incluso los discos que hoy ya no pondría guardan para ella un valor emocional irremplazable.
“La verdad, hasta los discos malos tienen su historia. Me recuerdan lo mucho que he evolucionado como selectora, y eso me hace sonreír. ¡Jaja!”
Algunos de sus vinilos más preciados, como Spacer Woman de Charlie, Phantom Studies de Ben Klock & Marcel Dettmann, o We Met Under The Strobelight de Héctor Oaks, funcionan para ella como cápsulas de tiempo sonoro.
“No hay nada que se le compare a revivir un momento específico de tu vida a través de un disco favorito. Es la forma más pura de nostalgia.”
Más allá de su carrera como DJ, agradece al vinilo por el crecimiento personal que ha propiciado en su vida.
“Lo valioso del vinilo no solo han sido las oportunidades profesionales que me ha abierto, sino la forma en que me ha hecho crecer como ser humano. Me ha enseñado que todo es posible si te entregas por completo, con el corazón y la mente. Y que, si te mantienes fiel a ti misma, la recompensa llega, de una forma u otra.”
ENTRE LO UNDERGROUND Y LO MAINSTREAM
La creciente convergencia entre la música electrónica underground y su versión más comercial ha generado múltiples debates sobre autenticidad y futuro. Carmen, sin embargo, encuentra en esta transición tanto desafíos como oportunidades.
“Es curioso cómo la música de club explotó durante y después del COVID, pero la forma en que se expresa hoy es muy distinta a la de antes. Y eso no es necesariamente malo: lo mainstream tiene la capacidad de atraer a mucha gente a la electrónica. Algunas de esas personas, con el tiempo, acabarán siguiendo su instinto hasta encontrar el camino hacia el underground.”
Para ella, lo underground no es una pose estética: es un espacio de verdad personal.
“Pertenezco al underground porque ahí encontré mi verdadero yo. No lo hago porque sea ‘cool’. Jamás sacrificaría esa conexión auténtica por dinero, poder o fama.”
Su afinidad con espacios emblemáticos como Bassiani o K41 refleja su compromiso con una cultura en la que la música va mucho más allá del entretenimiento.
“A veces, dentro del capitalismo, la música se reduce a un simple producto. Vamos a fiestas a consumir. Pero en lugares como estos, la música aún representa una ideología. Es política. Es resistencia.”
Actuar en estos templos del techno ha sido para ella una experiencia profundamente transformadora.
“Cuando toqué en Bassiani y K41 sentí una gran humildad. Quería dar lo mejor de mí porque el público allí realmente lo merece. Bailan como si fuera su última danza en libertad.”

UN PAISAJE SONORO EN TRANSFORMACIÓN
Carmen observa con atención cómo el público reacciona ante la comercialización del techno.
“Lo comercial suele tener una emocionalidad más accesible, más directa. El techno, en cambio, propone emociones más complejas que, aunque hermosas, pueden resultar abstractas para quien no está familiarizado.”
Aun así, le fascina tocar para audiencias que no conocen el género, y asumir el reto de seducirlas.
“Me encanta enfrentarme a públicos que claramente no han escuchado techno antes. Me propongo capturar su atención, llevarlos de la mano hasta que se dejen llevar.”
KUJE RECORDS: UN SELLO CON PROPÓSITO
El próximo capítulo en la historia de Carmen es el lanzamiento de su sello discográfico, Kuje Records, dedicado a potenciar el talento underground.
“Fundé mi primer sello a los 22 años, cuando aún estaba en la universidad. Solo saqué un lanzamiento —en cinta, de hecho— y luego me mudé a Berlín. Quería esperar el momento adecuado para lanzar un proyecto más serio. Hoy tengo el conocimiento y las conexiones necesarias para ayudar a que mis artistas sean escuchados.”
La visión de Kuje Records se centra en publicar música de baile atemporal, con ese toque especial capaz de transformar un set.
“La idea es editar música que resista el paso del tiempo, que tenga ese factor único que ayuda al DJ a reinventar la pista de baile en momentos clave.”
Carmen busca también visibilizar a productores emergentes que, por contexto geográfico o social, no tienen fácil acceso a la escena.
“Me interesa especialmente el trabajo de quienes no tienen contacto directo con la cultura del club: sin tiendas de discos, sin fiestas. Esa gente se guía por su intuición, no por las modas.”
El sello será un reflejo de sus valores: genuino, enérgico y con una dosis de irreverencia.
“Es importante para mí aportar a la escena desde muchos frentes, no solo como DJ.”
Aunque Kuje será un sello centrado en el vinilo, también tendrá distribución digital, para amplificar su impacto.
“Será un sello enfocado en el vinilo, lo que implica que cada tema debe sonar bien en ese formato. Pero también lanzaremos todo en digital porque, si el objetivo es visibilizar talento underground, hay que asegurarse de que la música circule.”
MIRANDO HACIA EL FUTURO
Carmen imagina un futuro vibrante para Kuje Records, como plataforma de impulso para nuevas voces.
“Me encantaría que el sello se convirtiera en un trampolín real, capaz de cambiar el rumbo de una carrera.”
Y sueña con que, décadas más adelante, su música siga encontrando oyentes con el mismo poder de impacto.
“Me gusta imaginar a alguien, en el año 2050, hurgando entre vinilos y encontrando uno de nuestros lanzamientos… emocionado porque aún suena igual de potente y vigente que 25 años atrás.”
Carmen Electro es mucho más que una DJ: es una activista del sonido, una mentora de nuevas generaciones y una visionaria comprometida con el futuro del techno. Con Kuje Records, está cimentando un nuevo horizonte para la música de baile: más auténtico, más diverso y profundamente humano.