Entrevista con Iñigo Villamil, fundador de Bahidorá.

Desde el paradisiaco entorno natural de Las Estacas, Morelos, Bahidorá ha reunido durante más de una década a una comunidad diversa que celebra la convergencia de música, arte naturaleza y sostenibilidad. Lo que empezó como un evento emergente se ha transformado en un referente en la escena cultural y musical de México. Desde su creación en 2013, Bahidorá ha reunido a su comunidad -que inició con 3.500 entusiastas y ahora supera lxs 11 mil- con talento emergente a punto de explotar, así como con artistas internacionales. La próxima edición de Bahidorá tendrá lugar del 14 al 16 de febrero de 2025, invitando a todxs a vivir una vez más la energía incomparable de este extraordinario encuentro. Hacemos esta entrevista a Iñigo Villamil, fundador de Bahidora que nos cuenta acerca de la creación del festival, su desarrollo y otros secretos del mismo.

¿Cuáles son la misión, visión y valores de Bahidorá?

Misión:

Aproximar a nuestra comunidad a experiencias genuinamente transformadoras, a través de música y cultura de alta calidad, y decisiones creativas tomadas con cuidado y consciencia.

Visión:

Ser un punto de encuentro de alto valor para nuestra comunidad para siempre.

Valores:

Expresión sin límite

Sentido de comunidad

Amor a la diversidad

Conciencia sostenible

Responsabilidad cívica

¿Qué experiencias laborales o personales fueron tus mayores inspiraciones para crear Bahidorá?

Soy ingeniero en electrónica, y desde la preparatoria tenía una afición por las artes multimedia, la producción de shows, escenarios y puestas en escena.

Empecé llevando a cabo fiestas underground en la CDMX con mis amigos y socios de aquel entonces (Distrito Global), buscando crear ambientes inmersivos que nos transportaran a lugares ficticios, de libertad y de juego. Eran fiestas temáticas, que realmente jugaban con el rol de los asistentes en la narrativa de la experiencia.

Tuve oportunidad de experimentar festivales inmersivos increíbles, como Fusion (Alemania), Boom Town y Glastonbury (Inglaterra), Dekmantel (Holanda) y Coachella y Burning Man (EE UU) realmente dejó una huella. Me enseñó distintos universos de posibilidades en la creación de festivales y experiencias inmersivas.

¿Cómo percibes la evolución de Bahidorá desde su primera edición hasta hoy?

El festival ha madurado en su producción, ofreciendo cada vez espacios más cómodos, comida más rica y una experiencia más agradable en general.

La curaduría musical ha evolucionado con nosotros, siempre atendiendo a nuestros gustos personales, pero también a tendencias cambiantes.

El público también ha evolucionado con nosotros. Por una parte, ahora es más ecléctico (gente distinta desde jóvenes de 20 años hasta personas más grandes de 40 para arriba). Siento que hoy nos gustan los festivales a una mayor diversidad de edades. Y el público también es cada vez más respetuoso con el lugar, con ellos mismos, y saben divertirse responsablemente. Me da la impresión de que la cultura de consciencia que promovemos en Bahidorá va permeando a cada vez más individuos que nos visitan, y es más evidente durante el evento mismo.

¿Tienes alguna edición favorita de Bahidorá? ¿Qué la hizo especial para ti?

No realmente. Cada edición es muy especial, y muy distinta a las demás.

La primera edición fue particularmente especial porque no sabíamos qué esperar, y nos dimos cuenta que habíamos creado algo que perdurará por bastante tiempo. Estuvo lleno de lindas sorpresas. Pero no necesariamente fue mi música favorita de todas, ni la producción más elaborada.

La tercera edición fue cuando lanzamos el segundo escenario, enfocado en música club, que abrió un nuevo universo de curaduría para Bahidorá.

Y así, cada edición tiene lo suyo - el festival va evolucionando con nosotros y con nuestra comunidad.

¿Qué artistas han sido tus favoritos para invitar al festival, o te han sorprendido en alguna edición?

Erykah Badu fue un privilegio verla, así como Mac Miller (RIP). Creo que han sido shows únicos en México.

Actos como Kindness, Blood Orange y The Internet, que son de mis artistas favoritos en general, y fue un gusto tenerlos en Bahidorá.

DJ’s increíbles, difíciles de encontrar en otros eventos con producción similar - como Move D, Fred P, Honey Dijon, Tama Sumo, Danilo Plessow (MCDE), Larry Heard, Masters at Work, Nightmares on Wax, Project Pablo y Gilles Peterson.

Y actos peculiares y difíciles de encontrar, como Antibalas, Africa Express, Cocorosie, Mayer Hawthorne o Mildlife también me traen lindos recuerdos.

¿Podrías contarnos sobre los esfuerzos sustentables del festival?

Trabajamos para adherirnos al ISO 20121 (Estándar Internacional para la realización de eventos sostenibles). Entre los esfuerzos que llevamos a cabo están:

Uso de vasos compostables

Compensación de 100% de la huella de carbono a través de organizaciones certificadas

Agua gratuita

Separación y envío a plantas de reciclaje, de la totalidad de los residuos que se generan en el evento

Concientización del público para el cuidado del río, y del parque en general, generando una cultura de responsabilidad compartida

En 2018 recibimos un reconocimiento por parte de Green Music Initiative por las prácticas que implementamos en el festival.

¿En qué se inspira el nombre de Bahidorá?

La etimología de Bahidorá es “Bahía de Ardora”, y hace referencia a los Mares de Ardora: un hermoso fenómeno natural en el que organismos marinos microscópicos, al hacer contacto entre ellos, emiten una luz colectiva tan poderosa que es visible desde el espacio. Encontramos una linda metáfora, en este fenómeno y en la luz deslumbrante que somos capaces de crear al conectar y disfrutar en comunidad.

¿Te gustaría crear otro festival en algún momento?

Sí, y ya lo hemos hecho. Nuestro grupo desarrolla también Akamba (un festival muy hermoso cerca de Guadalajara, con programación musical similar) y Remind (un festival con la intención de aproximar estas experiencias mágicas y transformadoras a generaciones más grandes, con una programación de “oldies”)

¿Qué es Distrito Global y qué tipo de actividades desarrollan?

Distrito Global es la mitad de Bahidorá. La otra mitad es Ache. Ambos nos hemos desempeñado como promotores de eventos de todo tipo: conciertos, festivales, ferias gastronómicas, eventos de networking, etc. Somos además agencias de producción de experiencias, y vendemos nuestros servicios de producción a clientes comerciales y de gobierno. Y somos expertos en comunicación, desarrollando campañas y proyectos mediáticos de distintas naturalezas.

¿Por qué eligieron Las Estacas, Morelos, como sede de Bahidorá? ¿Fue una decisión planificada desde el inicio o surgió por casualidad?

¿¡Por qué no?! Haha. Queríamos un lugar hermoso, práctico, fuera de la ciudad, que tuviera facilidades de producción, pero al mismo tiempo que estuviera suficientemente alejado de la ciudad para provocar una sensación de escape. Dimos con Las Estacas muy rápido, y la respuesta fue obvia. Además, hicimos clic muy rápido también con el equipo de Las Estacas, que no quería comenzar a desarrollar eventos en general - querían uno solo, que se adhiriera a su visión de parque, y le hablara a un público joven.

En los últimos años, Bahidorá ha integrado escenarios adicionales como el Silent Disco de Pepsi y el escenario de Aperol. ¿Cómo consideras que estas experiencias alternas aportan a la atmósfera del festival?

Los llamamos “microescenarios”, y creo que suman diversidad a la programación, y nos dan oportunidad de exhibir actos emergentes o locales al festival. Son también pequeños espacios inmersivos, que te transportan a lugares diferentes, lo cual creo que contribuye a la sensación de inmersividad y de exploración del festival. Queremos que el público explore, que se desprenda de la necesidad de estar en un lugar a una hora particular, y que disfrute del viaje por el que Bahidorá los va llevando orgánicamente. Y queremos que Bahidorá nos aproxime genuinamente a nuestra comunidad local, y que nos ofrezca espacios para ver a nuestra comunidad del otro lado del DJ booth también.

Si pudieras cambiar algo de las ediciones pasadas de Bahidorá, ¿qué sería?

No nos arrepentimos de nada. Todo ha sido aprendizaje, y la evolución de Bahidorá ha sido una experiencia de vida lindísima. No hay errores, sólo áreas de oportunidad que vamos corrigiendo. Y la diversión no para, es como armar un lego infinito.

¿Cuáles son tus actos favoritos para este año en Bahidorá? ¿Qué no deberíamos perdernos?

No me gusta recomendar ningún acto en particular. ¡Es muy difícil para mí! Todos los actos desde Kaytranada y Floating Points (que muchos dirían que son los principales) - hasta talentos nacionales excepcionales como Laura Itandehui y Diles que no me mate. Cada escenario y cada momento del día tendrá lo suyo. Y este año en particular, creo que cada uno de los tres días del festival está repleto con actos interesantes. Mi recomendación es conocer el lineup completo, escuchar nuestra playlist, y dejarse fascinar por todos los actos, conocidos y por conocer.